1 Un nuevo Comienzo. Dom Dic 02, 2012 5:15 am
taiki-kudo
Principiante
Prologo
Ya hace más de dos años de aquel suceso, aquello que hizo que mi vida diese un vuelco inesperado, aquel día de lluvia en el campo del Raimon, marco mi vida por siempre, era un día como otro cualquiera de entrenamiento, como era de costumbre el entrenador nos estaba dando demasiada caña, pero bueno una vez ya llevas un tiempo en el equipo te acostumbrabas, sin embargo ese día se le notaba más nervioso de lo normal y aunque el creyese que no se le notaba, sí que lo hacía, y mucho. Pero no le di demasiada importancia, el me tenía demasiado cariño debido que era por así llamarlo, “La Estrella del Equipo”, o como él quería llamarme, “El Numero Uno”. Yo como siempre iba a un paso lento para no cansarme, pero como era normal, Jake, el otro delantero del equipo siempre me quería superar en todo, y corría a toda velocidad para acabar antes, pero como era normal al rato se cansaba y se quedaba el último. Ya no le deba demasiada importancia, para mí era otra tontería mas de mi vida.
Cuando tan solo quedaba un cuarto de hora de entrenamiento, note como el entrenador empezaba a sudar demasiado, y entonces me acerque a él para preguntarle qué era lo que estaba pasando y porque había estado tan nervioso a lo largo del entrenamiento, así que sin más me acerque a él para ver qué era lo que estaba pasando.
-Markux: Entrenador, ¿qué es lo que le ocurre? Le veo…un poco nervioso.
-Entrenador: No me pasa nada hijo… Solo que tengo un poco de calor nada más.
Me dijo tartamudeando un poco que no era nada, solamente el calor que hacía, pero bueno yo había estado sudando bastante y no estaba sudando como él, de nuevo no le di demasiada importancia y seguí con el entrenamiento un poco preocupado por el entrenador. Ya por fin había finalizado el entrenamiento de hoy, cuando de repente un ruido tremendo se escucho, una nube de humo gris apareció en el campo donde nos encontrábamos el equipo. Escucho unos pasos muy acelerados y por el sonido sabia que eran los del entrenador, cuando mire a donde debería estar la entrada al instituto un balón apareció haciendo que el humo se dispersara y con muchísima fuerza me impacto en toda la cara haciendo que me cayese de espaldas. El impacto hizo que me quedase inconsciente durante unos minutos, cuando me desperté estaba tumbado delante de mi equipo, y a mi izquierda había un equipo de una equipacion de color negro y rojo, no podía identificar de que escuela eran, cuando me levante y me coloque frente a ellos los mire a los ojos. Pude ver que el que llevaba lo que sería la cinta de capitán, sus ojos eran de color rojo y dentro de ellos y de los demás, había como una pequeña estrella morada, de repente un pequeño FlashBack paso por mi cabeza, en el cual se veía a una persona sentada en un trono muy raro, daba órdenes a un chico vestido de militar, pero no se le veía la cara, solo el ojo derecho en el cual tenía una estrella morada, cómo ellos.
Un silencio inundo toda la Escuela Raimon durante unos leves segundos, este silencio fue roto porque de repente uno de ellos empezó a hablar en un idioma muy extraño por lo que supuse que era un pequeño pinganillo. Tras ello empezó a hablar en nuestro idioma, pero decía cosas muy extrañas.
-Sujeto: Bueno, se supone que sois la Escuela Raimon, perfecto sois nuestro próximo objetivo, os retamos a un duelo, vuestro equipo contra el nuestro, el vencedor se quedara con toda la otra escuela, ¿Qué os parece?
-Markux:No queremos jugar contra vosotros, sois mucho más mayores que nosotros, y eso es muy injusto, así que no aceptamos vuestro desafío.
-Sujeto: Bueno, sino queréis el partido, pues tened cuidado con las consecuencias que conlleva…
Tras esas palabras me dieron un balonazo por la espalda y me separaron del equipo, tras ello me rodearon todos, y unos balones aparecieron frente a ellos, empezaron a chutar con todas sus ganas contra mí, dejándome totalmente destrozado, tenia daños importantes por todo el cuerpo, pero lo que más me importaba eran mis piernas, una de ella fue dañada muy seriamente y se rompió, tras ello se fueron dejándome tirado en el suelo, mis compañeros me recogieron y me llevaron al hospital. El médico dijo que no debía jugar al fútbol hasta dentro de unos años. Mientras yo estaba en mi casa descansando, el fútbol ha cambiado mucho, ahora es solo un maldito negocio, pero por fin había conseguido mi sueño, que era poder volver a jugar al fútbol. Actualmente la Escuela Raimon no cuenta con un equipo de fútbol, así que sin más remedio me e tenido que cambiar de país. Ahora mismo vivo en Italia, y dentro de poco empezare de cero en el fútbol.
Ya hace más de dos años de aquel suceso, aquello que hizo que mi vida diese un vuelco inesperado, aquel día de lluvia en el campo del Raimon, marco mi vida por siempre, era un día como otro cualquiera de entrenamiento, como era de costumbre el entrenador nos estaba dando demasiada caña, pero bueno una vez ya llevas un tiempo en el equipo te acostumbrabas, sin embargo ese día se le notaba más nervioso de lo normal y aunque el creyese que no se le notaba, sí que lo hacía, y mucho. Pero no le di demasiada importancia, el me tenía demasiado cariño debido que era por así llamarlo, “La Estrella del Equipo”, o como él quería llamarme, “El Numero Uno”. Yo como siempre iba a un paso lento para no cansarme, pero como era normal, Jake, el otro delantero del equipo siempre me quería superar en todo, y corría a toda velocidad para acabar antes, pero como era normal al rato se cansaba y se quedaba el último. Ya no le deba demasiada importancia, para mí era otra tontería mas de mi vida.
Cuando tan solo quedaba un cuarto de hora de entrenamiento, note como el entrenador empezaba a sudar demasiado, y entonces me acerque a él para preguntarle qué era lo que estaba pasando y porque había estado tan nervioso a lo largo del entrenamiento, así que sin más me acerque a él para ver qué era lo que estaba pasando.
-Markux: Entrenador, ¿qué es lo que le ocurre? Le veo…un poco nervioso.
-Entrenador: No me pasa nada hijo… Solo que tengo un poco de calor nada más.
Me dijo tartamudeando un poco que no era nada, solamente el calor que hacía, pero bueno yo había estado sudando bastante y no estaba sudando como él, de nuevo no le di demasiada importancia y seguí con el entrenamiento un poco preocupado por el entrenador. Ya por fin había finalizado el entrenamiento de hoy, cuando de repente un ruido tremendo se escucho, una nube de humo gris apareció en el campo donde nos encontrábamos el equipo. Escucho unos pasos muy acelerados y por el sonido sabia que eran los del entrenador, cuando mire a donde debería estar la entrada al instituto un balón apareció haciendo que el humo se dispersara y con muchísima fuerza me impacto en toda la cara haciendo que me cayese de espaldas. El impacto hizo que me quedase inconsciente durante unos minutos, cuando me desperté estaba tumbado delante de mi equipo, y a mi izquierda había un equipo de una equipacion de color negro y rojo, no podía identificar de que escuela eran, cuando me levante y me coloque frente a ellos los mire a los ojos. Pude ver que el que llevaba lo que sería la cinta de capitán, sus ojos eran de color rojo y dentro de ellos y de los demás, había como una pequeña estrella morada, de repente un pequeño FlashBack paso por mi cabeza, en el cual se veía a una persona sentada en un trono muy raro, daba órdenes a un chico vestido de militar, pero no se le veía la cara, solo el ojo derecho en el cual tenía una estrella morada, cómo ellos.
Un silencio inundo toda la Escuela Raimon durante unos leves segundos, este silencio fue roto porque de repente uno de ellos empezó a hablar en un idioma muy extraño por lo que supuse que era un pequeño pinganillo. Tras ello empezó a hablar en nuestro idioma, pero decía cosas muy extrañas.
-Sujeto: Bueno, se supone que sois la Escuela Raimon, perfecto sois nuestro próximo objetivo, os retamos a un duelo, vuestro equipo contra el nuestro, el vencedor se quedara con toda la otra escuela, ¿Qué os parece?
-Markux:No queremos jugar contra vosotros, sois mucho más mayores que nosotros, y eso es muy injusto, así que no aceptamos vuestro desafío.
-Sujeto: Bueno, sino queréis el partido, pues tened cuidado con las consecuencias que conlleva…
Tras esas palabras me dieron un balonazo por la espalda y me separaron del equipo, tras ello me rodearon todos, y unos balones aparecieron frente a ellos, empezaron a chutar con todas sus ganas contra mí, dejándome totalmente destrozado, tenia daños importantes por todo el cuerpo, pero lo que más me importaba eran mis piernas, una de ella fue dañada muy seriamente y se rompió, tras ello se fueron dejándome tirado en el suelo, mis compañeros me recogieron y me llevaron al hospital. El médico dijo que no debía jugar al fútbol hasta dentro de unos años. Mientras yo estaba en mi casa descansando, el fútbol ha cambiado mucho, ahora es solo un maldito negocio, pero por fin había conseguido mi sueño, que era poder volver a jugar al fútbol. Actualmente la Escuela Raimon no cuenta con un equipo de fútbol, así que sin más remedio me e tenido que cambiar de país. Ahora mismo vivo en Italia, y dentro de poco empezare de cero en el fútbol.